Formas de Organización Administrativa en Jalisco

Formas de Organización Administrativa en Jalisco en México en México

[aioseo_breadcrumbs][rtbs name=»informes-juridicos-y-sectoriales»][rtbs name=»derecho»]

Formas de Organización Administrativa en Jalisco

La administración pública estatal en Jalisco se presenta en un contexto de transición en el que la sociedad civil demanda profundas transformaciones y altos resultados organizacionales que han impulsado cambios importantes en el aparato estatal para adecuarlo a los tiempos que le exige la ciudadanía. Los dos años que lleva el presente régimen administrativo no son suficientes para dar cabal cuenta del cambio total que se ha iniciado, pero si se observa que se busca hacer adaptaciones y modificaciones estructurales, funcionales y de concepción que reviertan la tradición de la administración estatal jaliscience, caracterizada por la confusión entre s político y el sistema administrativo. De un estudio sobre los miembros de la clase política local, llevado a cabo por el politólogo Javier Hurtado para el periodo 1947-1992, se concluye que el problema ha sido que, para los miembros de la clase política la variable sociedad no ha existido yen consecuencia consideran que sólo existen dos referentes de poder: el central y el de los grupos de poder regionales, considerando que para poder enfrentarse a uno hay que apoyarse en el otro. Siguiendo al autor, «se ha olvidado que se puede construir una nueva lógica y espacio de poder apoyándose en la sociedad». Ahora bien, la principal nota distintiva de los grupos políticos es su inamovilidad o bajos índices de renovación; lo que deriva en su alto grado de improvisación y, al mismo tiempo, pobre nivel de profesionalización. Y es que, en Jalisco, el principal mecanismo de ingreso a su clase política no es en función de la capacidad político-profesional; antes bien, la dependencia personal con el padrino, jefe político o mentor define la permanencia o continuidad de los políticos. Esta situación de coto exclusivo de poder, de corporativizarían de la cosa pública, con que los 302 políticos locales (muchos de ellos unidos entre sí por lazos de parentesco), había mantenido desde hace cinco décadas el poder político y la cosa pública, hizo que en ocasiones el poder central tuviera que intervenir. El actual régimen de gobierno estatal se encuentra inmerso en esta tradición, por lo que busca revertir el esquema de funcionamiento tradicional e impulsar la profesionalización de la administración pública, sustentada en la capacidad político-profesional de los servidores públicos. Tensión permanente entre el interés público y el interés privado Las características esenciales que le daban un sello distintivo al accionar político-administrativo en Jalisco eran, para «Jalisco a tiempo» (Primer Informe sobre Problemas del Desarrollo y Alternativas de Políticas Públicas), entre otras: Clientelismo: las relaciones y el intercambio entre políticos y funcionarios públicos de distinto nivel jerárquico son del tipo patrón-cliente; es decir, un intercambio de sumisión, obediencia, lealtad y apoyo a las políticas y programas determinados por los niveles altos de la jerarquía gubernamental a cambio de promoción para la carrera política del subordinado. Valoración de los lazos familiares y de amistad por encima de atribuciones impersonales: lo que implica un fuerte componente patrimonialista en el sistema político jalisciense. Esto es, los políticos y dirigentes hacen uso de la institución de gobierno o de representación, con sus instrumentos y recursos, como si fuese de su propiedad personal, como si fuese su patrimonio, colocando familiares y amigos como se hace en un negocio propio. Imposición de las exigencias del sistema por encima de la legalidad: ley no escrita que determina que las normas jurídicas pueden violarse si así lo requieren los intereses y las reglas básicas del sistema, como la superioridad de la voluntad del ejecutivo. Todo lo cual no tenía otro significado que la corrupción, entendida como el uso ilegal del poder público para el beneficio privado. Este reto está aún presente para la actual administración estatal, y aunque se están haciendo esfuerzos por enfrentarlo exitosamente, todavía es poco el tiempo de implementación de los programas diseñados e impulsados para promover una nueva cultura pública. [1]

Recursos

Notas y Referencias

  1. Información sobre Formas de Organización Administrativa en Jalisco de «Administración Local de México,» Tomo II, (1997) del Instituto Nacional de Administración Pública, A. C., México

Véase También

Bibliografía

  • Formas de Organización Administrativa en Jalisco en «La administración Pública en el Estado de Jalisco,» por Héctor Francisco Castañeda Jiménez (Instituto de Administración Pública del Estado de Jalisco, Guadalajara, Jalisco, México, 1987)
  • Información sobre Formas de Organización Administrativa en Jalisco en el «Diccionario Jurídico de la Administración Local,» de Salvador Trinxet (2017)

Deja un comentario